http://www.infolobos.com.ar/Nota.asp?IdNota=6235
I
Al hijo de Rosa
Lo amasijaron en la comisaría
Y ahora dicen que se ahorcó.
II
Toda la noche estuvimos
Esperando que llegara
Nos comimos el pan, pero
Guardamos un pedacito
Y cuando ya no se esperaban
Más milagros de gato esquivo
Dijimos: No era ese el hijo
Del carpintero. Somos nosotros.
Vamos a cascotear la comisaría.
III
¿Y cómo se dice?
IV
Se dice “el trabalenguas trabalenguas
El asesino te asesina”
V
Y yo sigo sin poder escribir algo bello de leer que gravite y ria y eleve. Escribo como patinando en cemento y todas las palabras se raspan y vuelven a mi haciendo pucheros y, simplemente, no puede hacerse mucho más. Intento proteger las palabras guardándolas en mis amigdalas (la palabra amigdalas tiene una extrañeza grande como una casa) y se arma flor de despelote y anginas otra vez.
VI
Pero yo no quería escribir nada bello. ¿Y cómo se dice algo feo con palabras afiebradas sonando bello? No sé. No he decidido nada al respecto. Sólo la urgencia de los hechos dispone que se debe escribir con lo que haya a mano.
VII
Todos los hijos afiebrados van corriendo en la penumbra. Algunos sobrevivirán esta madrugada entre las húmedas plumas del sueño. Otros van a rajarse la frente al borde de puertas que siempre se corren de lugar y otra vez otra vez. Una mano ejecutora dialoga ciegamente con las causas. Y nosotros…
todos nosotros humanos a un lado y otro
de miles de espejos distorsionados
siempre estamos intentando atar manos
o corriendo
o amasando
o de espaldas y ante la nada
soñando una vida hecha de publicidades.
3 comentarios:
muy bueno , gran poema!!!!
te mando un saludo repleto de flores rojas
Nada mas claro que patinar sobre cemento.
que buena la parte de los pibes afiebrados..Saludos
Escribo como patinando en cemento y todas las palabras se raspan y vuelven a mi haciendo pucheros
esto es genial
saludos
Publicar un comentario