03 agosto 2007

Quemazón post-final


Misticismo particular

Uno debería escribir para el universo, y debería entenderse esto así: no para la multitud, sino más allá algo que podría sobrevenir, una puerta abierta ante la cual por arte de magia trascendental se abre el infinito/no posible etc. Pero en el pimpollo secretito la creciente complacencia de un único lector. Yo descubro una y otra vez en el fondo de sedimento culpable el guiño de un solo elegido lector. Una y otra vez le ví la cara, en el fondo del texto, jadeante de exaltación.
Y para hacerla corta creí que era fulano o mengano. Y dije mil veces la superstición del ídolo pagano tantas veces como olvide lo que no podía nombrar.
Pero detrás de las máscaras se esconde la orilla inalcanzable.
Otro demasiado lejos siempre.
Ojos ciegos donde de vos nada (la nada que salió de vos).
Lo que no puedo nombrar.
Seguro es lo siguiente…
Seguro, no me vas a creer…
O me vas a decir: “Misticismo particular”
¿Pero cómo te digo que lo vi?
(y me dirías: También, Nora, viste un ovni en diciembre del 98 y años después en navidad con tu primo en brazos te diste cuenta que un mini globo aerostático era igual a tu volador intergaláctico ¿Y cómo le explicaste después a tu primo que los fuegos artificiales no matan a los pajaritos?)
Yo no puedo explicar todo; y además no viene al caso.
Pero la cara del absoluto ciego…
(y hablando de ciegos pienso ahora que Borges soñó con una biblioteca infinita)
Pero no sé si es lo mismo, bien uno podría decir que el absoluto está simplemente construido por discursos (imaginario hecho ley y realidad).
Pero quiero creer que la angustia que desea el absoluto lo que busca es ese resto que dejan afuera nuestras sabidurías. Un resto más allá (ay demasiado lejos) que no pueden atrapar (desenjaulado for ever) El todo no es igual a la suma y superposición de las partes.
Fucking idea de la perfección.
Y otra vez lo digo, que todo esto no tiene nada que ver, que son palabras, y que detrás había algo innombrable.
(otra vez por las ramas se te vino a cruzar Lacan o Kristeva) No, tampoco, no.
¿Pero es que te acecha?
El rostro no viene marchando, no está a la vuelta de la esquina. Simplemente está.
Pero ahora no estoy de acuerdo con vos.
¿Con quién?
¿Y vos quién sos?
No ¿Vos quién sos?

2 comentarios:

Diego de la Fuente dijo...

clap clap clap

Unknown dijo...

Mas allá de los mares
donde crujen los mares
suben los mares
ruedan los mares
corren los mares
bajan los mares
más allá de los mares
hay otros mares
donde viven los mares
saltan los mares
bordan los mares
vuelan los mares
sueñan los mares
más allá de los mares
que cuernos
que cornos
que corpúsculos marinos
que son mares de mares
maricientos mares más allá de los mares.